26 ago 2012

Al norte o al sur?




Llegamos a Dhaka agotados después de 6 matadoras horas en tren. Nuestra idea inicial era ir a Bogra al norte de Dhaka, a unas 3 horas en autobús para que Roke pudiese sacar una serie de fotos de una comunidad nómada que cuando vive lluvias como las de esta temporada se tiene que desplazar a tierras más altas y con ellos, se desplazan las casas, los puestitos, la escuela...pero al llegar a la compañía de autobuses nos dijeron que solo había un autobús de noche y no queríamos perder tiempo así que hicimos un plan B de emergencia ( o de ida de olla) y nos fuimos corriendo al puerto para irnos en Rocket hasta Sundarban, la parte más remota e inaccesible de Bangladesh en la que solo los transportes marítimos pueden llegar. Ahí que nos montamos, en un "barco" de 1928. Cuando decimos que el barco estaba repleto, os podéis imaginar un barco donde cada uno tiene su asiento o su cabina para dormir y cuelgan el cartell de "completo".



Bien pues, como todo en Bangladesh, el barquito no se quedó corto. La parte inferior (la que todos nos imaginamos como el gran salón del titanic) era un NADA, descubierto sin cristaleras, donde había centenares de personas tiradas en el suelo duermiendo. Familias enteras, personas solas, ancianos, criaturas de todas las edades...fue ver eso y tatxannn ponerme a llorar, literal. Lo que iban a ser 10 horas de "semicrucero" se veían convertidas en 10 horas de convivir con ese calor, ese olor, era como dormir en la calle con centenares de personas....que ya llevabamos soportando todo el viaje y que después de toda la paliza metida hasta el momento, no me apetecía en absoluto así que uno con cara de tonto pero que de tonto no tenía un pelo nos la metió dobladísima alquilandonos " LA CABINA DEL CAPITÁN" por 30 euros, luego fueron 20 y terminaron siendo 16. ( NO COMMENT de como era la cabina...)Viendo la desesperación y el caos que iba a suponer dormir con toda esa gente, lo cogimos.



Yo seguía decepcionada, agotada y enfadada con este país por permitir estas cosas, por permitir que se aceptara meter en una embarcación en precarias condiciones a tantas personas y encima tener la indecencia de cobrarles 2€ por el viaje, enfadada conmigo misma por ser incapaz de aguantar como ellos y dormir al intemperie con toda la muchedumbre, mientras iba a las que yo pensaba que serían las maravillosas playas de Koakata, agotada por todo el trajín de viaje y la paliza no solo física, sino también mental que todo esto me estaba llevando y decepcionada porque Roke estaba tan normal, como si estuviesemos dando un paseo por la ría.
Al final, entre consuelos en una esquinita, apareció a nuestro lado un camarero ( o fumador, pq solo le veíamos fuera fumando) de la first class del barco. Nos dijo que había habitaciones en la 1a clase que estaban libres y que las más caras costaban 15€. Ya no estaba todo lo de antes, estaba requetecabreada! NOS HABIAN TIMADOOO. El panoli de la cabina del capitán nos había timado. Roke hizo lo posible y lo imposible para encontrarle y ya cuando le dabamos en el casino de Dhaka jugandose nuestros 16€ apareció con nuestro ticket, que sin él no podíamos bajarnos (el tiquet marcaba 0,80, eso es lo que cuesta supuestamente el viajar 10 horas en ese catxarro)
Cuando nos vió la cara, quiso fundirse y creo que no entendía porque hasta que le llevamos de patitas con el manager del barco. Roke, todo profesional les sentó en una mesa a todos (el manager, el tontito y 4 espabilados más que le miraban con cara de pocker) y les canto al parecer, la mejor retaila nunca escuchada  (yo me fui a la cabina del capitán a buscar las mochilas, pasando y pisando a toda la gente del piso patera) y cuando llegué, ya teníamos habitación en first class con salida al balcón del barco y con 100 takas (1 euro) de vuelta, por timadores.
La first class, no era una first class, pero nuestra decencia valía mucho más que una noche de transatlántico.
Nos fuimos a dormir con la conciencia de no haber sido timados de nuevo y con ganas de llegar a Barsial hacer un ratín de autobús y vernos tumbados en la arenita de Koakata.





Llegamos a las 5 de la mañana a Barisal y cogimos un autobús hacia Kuakata. Lo que iba a ser un trayecto tranquilo con aires a mar fue una TORTURA en toda regla. De nuevo, lloros y lágrimas al ver que para hacer 100 km, se tardaron nada más y nada menos que 6 horas de reloj, sentados en una primera fila en un autobús que se estropeó, se recalentó y subieron como 3 veces más de la gente permitida. Al final, entre cambios de autobuses, cruces de puentes, sube y baja a la gente y para a comer unos fideos, yo solo me quería morir!
Salimos a las 6 de la mañana y llegamos a la 1 del mediodía en un sitio que parecía de todo menos un lugar con ambiente de playa y sol al que nos podíamos imaginar (lejos de bernidorm....pero....¿eso?
Roke había visto un sitio idílico en la guía para dormir, al lado de la playa en cabañitas...tenía muy buena pinta y resultó que cuando llegamos, ya no existía el sitio (hora más perdida) así que entre que buscamos un sitio para dormir y que NO HABÍA NINGUN SITIO PARA COMER EN TODO EL MALDITO PUEBLO DE PLAYA (odio el Ramadán y todo lo que termine en ÁN) nos dieron las 4 de la tarde comiendo arroz blanco con plátano. Bueno bueno bueno, yo estaba que no daba crédito y como tampoco tenía lagrimas para más...de nuevo, no nos quedó otra que adaptarnos a lo que había e intentar disfrutarlo al máximo.
Uuuu menudo planazo, un fin de fiesta digno de recordar.



Una vez comido el arroz pasado y los 2 platanitos yo ya iba derechita a por el bikini cuando me dije mmmm y donde están los turistas? y la playa? los txiringuitos?? ñekñekñekñek ni turistas ni playa amigas y amigos, era una esplanada de 30 km donde las bangladeshies se metían vestidas y hasta con sombrero para salir retratadas en las autofotos que se hacían con sus maridos en plan titanic. Me QUERIA AHOGAR, MORIR O VOLVERME A CASA!!!
Ya si encima le sumamos que al caprichoso se le ocurrió darle 20 takas(20 centimos) a un niñato que iba a en moto intentando vendernos algo para que nos dejara correr unos km por la playa a lo París Dakar...

No sé si fue el barco, la playa, el conjunto, el PORFIN Fin del Ramadán o que narices pero, el resultado final fue el esperado: Caí enferma con fiebre, catarro y una medioinsolación. Sí, toda la culpa es mía :)
Después de la fatídica noche que pasé o mejor dicho, pasamos...porque Roke estuvo cuidandome toda la noche, lo mejor estaba por venir. Yo solo quería irme de ese sitio, aunque tuviese que meterme otras 6 horas de autobús y 10 de barco. Llegamos a la estación fantasma (yo seguía mal) y nos dijeron que por ser el fin de fiesta, no había transportes ese día.
Jajaja BINGOO. Yo ya estaba marcando el número de mis padres para que viniesen a buscarme cuando se puso a llover como nunca y pensé que mejor llamar al 112 directamente pq de esa no salíamos y ni mucho menos llegabamos a Dhaka para coger nuestro vuelo para regresar a casa.

De la nada, salió un chaval que nos intentó ayudar como pudo, dándonos opciones de como poder ir a Barisal y regresar en barco, pero ninguna nos convencia. O eran extremadamente caras y no teníamos suficiente dinero para pagarlas (tampoco había cajeros..) o eran demasiado tarde o eran demasiado arriesgadas. Salió la opción de moto un par de veces pero como llovía y yo estaba mal, las descartamos siempre hasta que al final dije que me daba todo igual pero que quería llegar, nos ibamos en moto hasta el sitio más cercano donde hubiese un autobús y nos pudiese llevar al maldito barco para regresar a Dhaka.
Y así lo hicimos, Roke más feliz que feliz por volver a montarse en moto. Cada uno con su conductor (los 2 de blanco inmaculado, estrenaban sus chilabas nuevas como si fuese Fiesta Mayor, no por nosotros, por lo del Ramadán...) nos metimos a hacer 30 km pasando por barro, baches, rios con lanzaderas y cruzando cachos de río en moto y con el agua por las rodillas. Así que, las chilabas quedaron del color del paladin a la taza, eso sí, con las 400 takas que les dimos a cada uno, como para comprarse 30 de diferentes...



Llegamos como buenamente pudimos al autobus y de ahí a 3 horas llegariamos al pueblo donde cogeríamos el barco. Cuando todo parecía haberse terminado y estar más cerca que nunca de tocar la capital, vimos el "BARCO" esta vez en mayúsculas que nos iba a llevar. Yo no sé pq, me había ya imaginado de nuevo con el first class cuando el MANAGER del catxarro2 nos dijo que por 1000takas (10 euros) nos podía ofrecer una cabina con una única cama de 80cm. No teníamos más dinero así que, síii ahí terminé de pasar mi etapa de fiebre, tos y mocos. En una cama de 80 en una cabina que tendría 1.70 x 1m, los 2 y otro habitante que se comió parte del pan de molde que llevabamos como meriendacenadesayuno. Le bauticé como Rata, pq el agujero era bastante grande como para que un ejercito de hormigas lo hubiese hecho en tiempo record así que a pesar de no verla pero sí intuírla, los 3 como buenamente pudimos compartimos 12 horas en ese sitio.





Por fin, entre el dopaje que llevaba, el mareo de baibén de las olas y el trajín de toda la aventurilla, llegamos a Dhaka a las 6 de la mañana, de nuevo con intenciones de tirarme a la bartola los 2 días que me quedan en Bangladesh en un hotelazo de 5 estrellas sin hacer nada, comiendo bien y descansando pero, para 2 días que quedaban....pq no terminar de vivirlos como se merece este sitio?







2 comentarios:

  1. Bufff, te imagino besando el suelo al llegar a Loiu! Menuda aventura! :)

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  2. Grandes. Roke, kasualidades ikusi naben facebooken zure blog-an linke. Sabía que ibais para Bangladesh, igual me comentarías pero ni idea de que teníais blog. Así que me acabo de chupar tanto el de este año como el del año pasado. Oso ondo, pareja, oso ondo. Este blog bastante mejor que el del año pasado y seguro que el del año que viene saldrá aún mejor. A seguir explorando y gozándola. Egongoga!!!

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